viernes, 14 de mayo de 2010

Testigos de otros tiempos




Viejos testigos del lugar, presidían la entrada al viejo mercado, dando sombra y cobijo a quienes se protegían bajo su sombra y hoy presencian el incansable corretear de los niños, centenarias ya merecen todo nuestro cuidado y cariño.











Apenas si la vemos acá, pero allí está, presidiendo la entrada al comedor; seguramente con su sonido anunciaba que la comida ya esperaba en las mesas.

Ahora está ubicada en el patio cubierto, junto a la escalera; ya no se escucha sonar a diario, ha sido desplazada por el moderno timbre computarizado. Pero….. si se corta la luz o es necesario nuevos llamados de atención … solo entonces deja oir su voz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

  La casa maldita de Ricardo Mariño compra de la cooperadora